Salto de longitud:

El salto de longitud es uno de los eventos que componen el programa de las pruebas de atletismo. Es una especialidad que se encuentra dentro de las pruebas de campo y a su vez en el área de saltos.
El salto sin requerimientos reglamentarios, es un gesto natural, podríamos decir, que el hombre lo realiza en forma casi instintiva. Cuando aplicamos una determinada técnica, lo único que pretendemos es sacar más rendimiento al gesto natural. Por ello aconsejamos que no se obligue al atleta, deportista, alumno, a los jóvenes a adoptar una técnica determinada, sino orientarle a la obtención del máximo rendimiento, eligiendo su propia técnica de acuerdo con sus características psíquicas y físicas.

Para el estudio de la técnica base, dividiremos el salto en:
  • Carrera de aproximación
  • Batida
  • Vuelo
  • Caída

Carrera de aproximación

La técnica de la carrera de aproximación es similar a la carrera de velocidad, con las variantes que la salida no es explosiva, en conjunto es más progresiva y que al final de la misma, hay que efectuar un salto desde un lugar determinado y que en ese momento se ha debido conseguir la máxima velocidad que el atleta sea capaz de controlar.
Por ello, la velocidad, el ritmo, el equilibrio y el control son características inherentes en esta fase.
Para conseguir estas características, el saltador correrá con algunas diferencias respecto a la carrera de velocidad; su correr será más progresivo, sus rodillas más altas y su tronco más vertical.

Podríamos diferenciar varias fases en la carrera:
  • El inicio en la referencia de salida
  • La progresión
  • La preparación para la batida

El inicio
Puede ser en una posición estática en la referencia de salida. (En posición erguida, o en aptitud similar a una salida en pie).
O también previos unos movimientos que pueden ser pasos u otros gestos activos como trotes, botes, dobles pasos, etc. Normalmente y a efectos de talonamiento correcto, se llega a la referencia inicial con el pie de batida.

La progresión
A partir de la referencia inicial, el atleta incrementa en sus pasos la frecuencia, la amplitud, o ambas cosas a la vez, hasta que se estabilizan estos parámetros mientras se incrementa progresivamente su velocidad. Normalmente se emplean en esta fase de catorce a diez y ocho apoyos.

La preparación para la batida
De forma instintiva se produce en todos los saltadores un cambio de ritmo en los últimos pasos (más o menos acusado, según el estilo de abatir del atleta). El anteúltimo paso es más largo que los de la progresión y el último debe ser más corto y más rápido. Proporcionándose mediante estos ajustes un descanso y retraso del centro de gravedad del atleta respecto al pie de batida, lo que permitirá efectuar esta con más eficacia.

La longitud de la carrera en atletas formados oscila:
Hombres 16 a 20 apoyos de 30 a 45 metros
Mujeres 16 a 20 apoyos de 25 a 40 metros

No obstante, esta longitud no es fija para cada atleta y varía según verían sus parámetros morfológicos y físicos así como su nivel técnico y de entrenamiento. Circunstancialmente pueden variar la longitud de la carrera, las condiciones ambientales (viento, estado de la pista, etc.).


La batida
Con el ultimo apoyo de la carrera o colocación del pie sobre la tabla, se inicia esta fase de salto, la más importante y difícil. Dura en los buenos saltos entre .12 y .13 segundos efectuándose este breve espacio de tiempo de una serie de rápidas acciones que para su estudio las dividiremos en:
  • Amortiguamiento
  • Apoyo
  • Impulso
Con la misma terminología que empleábamos en la zancada de carrera pues de una potente zancada se trata.

Amortiguamiento o colocación del pie de batida en la tabla
La colocación se hace de metatarso y preferentemente sobre el lado externo del pie (arco de amortiguamiento), la rodilla va casi extendida, la pierna forma con el piso un ángulo que varía entre 115° y 120°. El tronco en ese momento queda retrasado respecto a la prolongación del eje longitudinal de la pierna de batida.
La cabeza erguida y mirando hacia adelante, nunca hacia abajo. La pierna libre y los brazos actúan coordinando la acción.

Apoyo
En esta fase el centro de gravedad del saltador pasa a situarse en la vertical del pie de batida, como consecuencia y preparando la acción posterior, la pierna de batida se flexiona en cadera, rodilla (145° - 150°) y tobillo; el contacto sigue siendo de metatarso (arco de apoyo) aunque el talón, se acerque a la pista, los brazos y la pierna libre se aproximan al eje longitudinal del cuerpo.

Impulso
Se inicia cuando el centro de gravedad del saltador sobrepasa la vertical del apoyo. La pierna de batida se extiende explosivamente en sus articulaciones de cadera, rodilla y tobillo. La pierna libre en rápido movimiento, va hacia adelante y arriba, flexionada por la rodilla llega a la altura de la cadera. Los brazos, flexionados como en carrera y algo más separados del tronco, en forma coordinada equilibra la acción bloqueándose cuando la mano adelantada llega hasta la altura de la cara, este bloqueo produce una elevación de hombros. Para favorecer el equilibrio del vuelo, el tronco debe permanecer vertical. Termina la batida cuando el dedo mayor del pie abandona impulsando (arco de impulso). La tabla.
La velocidad y el ángulo de batida varían según las características del saltador. Los saltadores en los que predomina la fuerza, emplean ángulos mayores, siendo más apreciables los cambios de ritmo y de amplitud de los últimos pasos. Los más veloces emplean ángulos y trayectorias de vuelo más tensas, las variaciones en los dos últimos pasos son menos significativos.



El vuelo
Se inicia en el momento en el que termina la fase anterior, o sea cuando el pie de batida abandona la tabla. Para su estudio dividimos la fase en tres partes:
  • Despegue
  • Suspensión
  • Adaptación

Despegue
Es como una continuación aérea de la fase de impulso de la batida. El atleta mantiene la posición durante un breve instante que le asegurara efectuar correctamente la fase anterior.
En esta actitud, el saltador recorre aproximadamente un 10% de su trayectoria aérea.

Suspensión
El saltador para equilibrar la acción realiza una seria de gesto, el inicio de estos movimientos marca el comienzo de esta sub fase. Es durante la suspensión, cuando el atleta alcanza su máxima altura sobre el suelo. Finalizar la sub fase en el momento en el que el saltador se prepara para tomar contacto con el foso, aproximadamente cuando se lleva el 85% de vuelo.
Existen en vigor tres técnicas en los movimientos que ejecuta el atleta durante esta sub fase, dichos movimientos van encaminados a adoptar una posición final más equilibrada y rentable.
Técnica natural o 1 y 1/2
Para saltos de poca longitud y para principiantes. Es muy simple durante la suspensión la pierna de batida se une a la libre y en esa posición de “sentado” se efectúa la traslación.
Técnica de extensión
En esta técnica, terminando el despegue, la pierna libre se relaja y va atrás, para colocarse a la misma altura que la de batida, los brazos por arriba o lateralmente van también atrás, propiciando la flexión dorsal del tronco, posteriormente se produce una acción global en sentido inverso “golpe de riñones” para prepararse para la caída.
Técnica de paso o tijeras
El saltador en cierta forma continua “corriendo” en el aire en esta técnica. Después de la batida el atleta relaja y deja caer la pierna libre hasta que queda extendida, dejándola que valla atrás, a la vez mueve la pierna de batida hacia adelante, completando la zancada aérea.
En esta fase del salto, el tronco mantiene una posición de ligera inclinación hacia atrás. Para efectuar el medio el atleta recoge la pierna libre y muy flexionada, la lleva hacia adelante, semiextendiendola hacia la horizontal y aproximadamente a la misma altura que la pierna de batida, que después de completar la segunda zancada se ha extendido y colocado horizontalmente. Para propiciar el equilibrio de los movimientos de piernas, los brazos realizan circunducciones a nivel de la articulación del hombro y en el sentido de atrás adelante, estas acciones van coordinadas con los gestos de las piernas.
Se den los pasos que se den finaliza la secuencia con una flexión de tronco adelante sin que bajen las piernas, lo que requiera una intervención poderosa de los músculos abdominales.

Adaptación
El saltador, cuando su centro de gravedad entra en la forma descendente de la parábola del salto, debe acoplar su cuerpo para lograr un aterrizaje efectivo, para ello flexiona más su tronco hacia adelante, a la vez que lleva sus brazos por debajo - atrás o bien los coloca extendidos entre las piernas según las técnicas. Debe procurar en todo momento mantener sus pies altos. Cuando el contacto con el foso es inmediato, ahí una ligera elevación de tronco y oscilación de brazos adelante.

Caída
El saltador toma contacto en el foso con los talones y con los pies a la misma altura permitiendo, que sea la arena la que llegue a él y no el a la arena. Inmediatamente al contacto se flexionan las rodillas para mantener el paso de las caderas hacia adelante, según se entre con los pies juntos o separados, la caída deberá realizarse de frente o lateral.


CONCLUSIONES:
Finalmente, al ser un deporte individual,  también puede llegar a ser  aburrido, particularmente si la progresión de un atleta es más lenta que otros o se estanca. Los intereses se desvanecerán y se pierde el sentido del logro. Los Entrenadores deben estar alertas para su organización y atención a la participación de todos los atletas en
los grupos y probando diferentes niveles de habilidad. 


FUENTES:
Tratado de atletismo
Técnicas Atléticas
YouTube
Wikipedia
Imágenes de Google

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